En Patria Unida nos preocupa el aceleramiento en los últimos años de la cultura basada en la revolución sexual y la ideología de género, lo que nos obliga a poner particular atención en las propuestas de política pública y proyectos de ley que tienen como objetivo la desvalorización de la familia, el matrimonio, la niñez y el ser humano.
Por Alice Galván 16/05/2023
La mayoría de ellas impuestas por organismos internacionales que han socavado la soberanía de las naciones y engañado a la sociedad con el famoso “políticamente correcto”. Con este primer escrito iniciaremos el trasfondo de todas estas propuestas.
Creo que necesario ser claros y desmantelar el engaño internacional que hay detrás de la ideología de género como un sistema de pensamiento autoritario que destruye la identidad del ser humano, la maternidad, la familia y por tanto la humanidad. Una ideología que promueve la corporalidad y la “libre sexualidad humana” a través de las siguientes tesis:
“A) No hay naturaleza corporal que caracterice al ser humano, el sexo no es un dato originario de la naturaleza.
B) La dualidad del hombre y la mujer no pertenecen a la esencia de la criatura humana, la corporeidad y la sexualidad son roles determinados por la sociedad”[i]
Tesis que en el fondo ponen en duda e intentan romper con la identidad del ser humano y con la propia concepción del hombre. Toda su maquinaria está en marcha, comprendieron que para controlar a la sociedad es necesario destruir a la familia y para destruir a la familia es necesario destruir a la mujer.
Por lo anterior, es necesario hacer una serie de aclaraciones iniciales, tenemos la responsabilidad de transmitir un mensaje potente, con fondo y sustancia que exponga los engaños y explique la verdad de las cosas:
a) La vida humana comienza en el momento de la concepción y concluye con la muerte natural.
b) La persona humana es un ser sexuado (masculino o femenino) y por tanto la sexualidad no es solo un atributo, es un modo de ser de la persona.
c) Hombre y mujer son biológicamente distintos y tienen exactamente la misma dignidad de personas; es a partir de esa dignidad, que cada uno debe alcanzar lo que le es propio.
d) La familia ha sido, histórica y naturalmente, la primera célula de toda organización social y, por tanto, debe ser reconocida y protegida por el derecho y los estados.
e) Los padres de familia tienen derecho a elegir libremente la educación de sus hijos.
En tiempos del relativismo que impera el actuar del mundo requerimos ser personas de definiciones, en tiempos del silencio y lo políticamente correcto debemos ser los líderes que con valentía defiendan la verdad sin miedo y titubeos, en tiempos donde impera el autoritarismo debemos ser las voces del disenso, el debate y la propuesta.
[i] [i] Sarmiento Augusto, Vademecum para la Familia, La verdad del amor humano, 2015, Primera Edición, España, EUNSA, p. 114
Alice Galván:
@Alice_gl